domingo, 23 de septiembre de 2018

Carlos Gardel - El Día Que Me Quieras (escena completa) - Audio Excelente




... Y amaneció la mañana sombreada de verdes
hojas y ramas al sol del invierno... al viento de la brisa, la lluvia y el
frio... trémulo... de mis almendros en flor...



Y mire el cielo de cirros y pétalos marchitos,
y tuve miedo... Y de mis ojos, cayesen lágrimas... Él, acercase en su cariñó, y
me dio la mano, y sonrío...

Carlos Gardel - El Día Que Me Quieras (escena completa) - Audio Excelente






... Y amaneció la mañana sombreada de verdes
hojas y ramas al sol del invierno... al viento de la brisa, la lluvia y el
frio... trémulo... de mis almendros en flor...



Y mire el cielo de cirros y pétalos marchitos,
y tuve miedo... Y de mis ojos, cayesen lágrimas... Él, acercase en su cariñó, y
me dio la mano, y sonrío...

lunes, 10 de septiembre de 2018

♫ CÁNTICO 134 ♫ ¿Te ves en el Nuevo Mundo? - En Vivo - Coro y Orquesta





UN CANTO A JEHOVA DIOS...


Dios es amor


“Antes del principio, fue “Dios, la energía infinita, el espiritual y el ejército de los Ángeles”. Y creó Dios el Reino de los cielos.


El Reino de los cielos, era semejante a un vaivén de eternas luces intermitentes y brillantes y resplandecientes como millones de piedras preciosas reflejadas en los ojos de Dios.


El Reino de los cielos, era un lugar celeste que no podía describirse con la razón humana sino por la confianza divina de los seres espirituales que residían en él.


Y reinaba en él una armonía, un gobierno y una santidad, jamás observada por el mundo y la bondad, el amor, la paz, la justicia y el espíritu de Dios moviese en aquel lugar celestial”.



Dios es un fuego

♫ CÁNTICO 134 ♫ ¿Te ves en el Nuevo Mundo? - En Vivo - Coro y Orquesta



UN CANTO A JEHOVA DIOS...
Dios es amor
“Antes del principio, fue “Dios, la energía infinita, el espiritual y el ejército de los Ángeles”. Y creó Dios el Reino de los cielos.
El Reino de los cielos, era semejante a un vaivén de eternas luces intermitentes y brillantes y resplandecientes como millones de piedras preciosas reflejadas en los ojos de Dios.
El Reino de los cielos, era un lugar celeste que no podía describirse con la razón humana sino por la confianza divina de los seres espirituales que residían en él.
Y reinaba en él una armonía, un gobierno y una santidad, jamás observada por el mundo y la bondad, el amor, la paz, la justicia y el espíritu de Dios moviese en aquel lugar celestial”.
Dios es un fuego